Entrevista, Preparen, apunten… Fidel Hernández
Es el turno del presidente de Fundacomunidad, Fidel Hernández. Asegura que el mejor gobernador que ha tenido Carabobo es Rafael Lacava, que no le molestó no ser elegido como diputado en las pasadas postulaciones del Gran Polo Patriótico, que una vez quisieron matarlo en la avenida Bolívar de Valencia, que en el chavismo se maneja el egoísmo y que a veces tiene que saber cuándo sacar la espada y cuando no, como dice la técnica del Shaolim. No se la pierda
– ¿Qué está haciendo Fidel Hernández por Venezuela?
– Empujando la dirección de la construcción del estado comunal en el marco de la formación, organización ayudando en esa tarea del poder popular para la construcción del estado comunal. Yo como presidente de Fundacomunidad, tengo 55 casas de gobierno en los 14 municipios bajo mi responsabilidad. Tenemos la dirección de trabajar como un solo equipo, esa es la instrucción del presidente Nicolás Maduro y del gobernador Rafael Lacava. Trabajar en las siete transformaciones, el Plan de la Patria, atender al pueblo en sus luchas, impulsar la construcción del estado comunal, atender a la gente, en ese sentido estoy abocado a esa tarea. Eso implica tener metodología para el trabajo porque en el marco de las dificultades que tiene el país, económicas y presupuestarias, hay que tener mucho ingenio, buscar nuevas estrategias que te permitan con lo poco que tienes, resolver mucho y hay que reunirse con la gente, discutir, armar juegos, planes, programas, proyectos, articular con las otras instituciones y eso ha permitido avanzar más. Ahora estamos en muchas mejores condiciones que antes. El tema de la aprobación de proyectos directamente por el poder popular ha sido una línea correcta, porque las cosas más inmediatas se logran resolver. Estoy consciente de eso y todo el tiempo para dedicarla a mi trabajo lo enfoco en esas líneas y por supuesto acompañado del gobernador Rafael Lacava y en Valencia con Dina Castillo y esperamos que en la nueva etapa después del 27 de julio lo vamos a hacer con todos los alcaldes que queden electos.
– ¿Quién es el mejor gobernador chavista que ha tenido Carabobo?
– Yo vengo desde antes de Chávez, vengo de una formación política y de una lucha de antes de Chávez. Éramos resistencia de los gobiernos adecos y copeyanos, después nos conectamos con Chávez y la rebelión, yo comencé con Chávez desde que ganó, trabajé para su elección y reelecciones. Luego en Carabobo cuando se da el primero gobierno revolucionario y luego el segundo, no me cabe la menor duda que la mejor gestión y no solo del lado chavista, sino de todas las anteriores es Rafael Lacava porque le tocó gobernar en medio de la crisis, muy difícil, hubo unos que gobernaron en la opulencia. Fundacomunidad cuando Acosta Carlez tenia 38 vehículos y ahora tengo un solo vehículo que por cierto está dañado y tengo que resolverlo. Pero te aseguro que somos más eficaces que en esa época, porque hay una visión de gestión Lacava porque eso le da un sello a la manera de gobernar. Hay que resolver e inventar. Eso ha permitido que haya esa gestión y como le dijo el presidente a Lacava, sabes que es difícil, ir a la reelección y ganarla, porque los liderazgos se agotan, luego la gestión se agota, tienes que reinventarte, ver que haces ahora y ese es el reto, ver que va a hacer ahora en estos cuatro años, tener la fortaleza que es la experiencia de dos periodos anteriores, hay un equipo mucho más maduro, mucho más coherente que te permitan resolver cosas que antes no resolviste. Estoy convencido que Lacava en este nuevo periodo va a ser mejor que las gestiones anteriores sobre todo en el tema comunal. Yo apuesto que va a hacer así.
– ¿Para ti es una cuenta pendiente ser diputado o alcalde, tener un cargo de elección popular?
– Yo cumplí 49 años de vida artística y el gobernador me acompañó en un acto que hice en el Teatro Municipal. Participé en las postulaciones para diputado, pero no salí y Rafael dijo algo que yo comparto enteramente. Dijo, ‘yo prefiero tener el afecto de esta gente, que tener un curul de diputado, porque esto vale más’. Estoy preparado para cualquier escenario, me siento complacido, creo que en el ejecutivo logro tener un papel importante. Los cargos, los espacios de poder sirven o no sirven depende de cómo sea tu voluntad, tu empeño y capacidad, puedes ser diputado y pasar en la nada, puede ser secretario de gobierno y pasar en la nada. Y puedes ser un líder comunal y construyes, la gente te quiere, te reconoce. Estoy muy agradecido, no soy un hombre con resentimientos, ni con frustraciones en torno a lo que pude ser y no pude, tengo lo que merezco y en este momento, me siento satisfecho, feliz y reconocido y en ese sentido le agradezco al gobernador Lacava que haya tenido la delicadeza de reconocerme e incorporarme a su trabajo. A la vida que me de salud, paz, pero en términos de aspiraciones personales nada, si Dios me regala algo, será bienvenido.
– ¿Has recibido violencia de parte de la oposición y del chavismo en estos años de turbulencia?
– Me ha tocado enfrentar guarimbas, han ido a cacerolear a mi casa, trato de enconcharme cuando la oposición loca, que no mira, que no reconoce, me ha tocado, pero no vivo con paranoia. Estoy identificado, no puedo pasar desapercibido. Uno expone en riesgo su vida, pero no he tenido un incidente desafortunado. Una vez en una guarimba, cuando los tipos habían destruido media ciudad, yo paso en medio de la cuestión y sentí la energía. Al día siguiente un amigo me dice, ‘no vuelvas a hacer eso, te iban a matar, tuve que decirles que eras mi tío’. Eso fue en la avenida Bolívar. No soy un hombre de armas tomar, no llegue a dar un tiro, pero había otros que sí, esa no es mi fortaleza.
– ¿Y del chavismo?
– En el chavismo se maneja más el egoísmo, que ven que tú creces, porque tu si y yo no, que tengas el favoritismo de un gobernante y ellos no, te quieren quitar para ponerse ellos, esas cosas que son más parte de la miseria humana, lo he vivido siempre, porque he sido un hombre extrovertido, he tenido protagonismo en toda la revolución. Y aparecen las miserias humanas, pero como yo no ando con malicia de andar jodiendo a nadie, salgo airoso para los siguientes escenarios y cuando siento que me sacan de algún juego, hago lo que dice la técnica del Shaolim, saber cuando tengo que sacar la espada y luego saber cuando es el combate de frente, eso me ha permitido a mis 67 años, mantenerme activo y vivo para la revolución.
– ¿Qué pasó en la Sociedad Bolivariana?
– Eso se enredó por eso de las miserias humanas. Eso se resolvía fácil por la ley, ante la ausencia temporal del presidente, asume el vicepresidente, pero pusieron al vocal a Denis Miraldo. Se fue a Caracas y el presidente de la Sociedad Bolivariana de Venezuela dijo que no tiene sentido, el vocal no puede sustituir al presidente. Hubo algunos actores involucrados que se aferraron a esa sola visión, la profesora Lilian estaba enferma, los que se quedaron ahí por ella. Al final se resolvió porque la profesora se reincorporó en silla de ruedas. Eso me pareció que era innecesario, ella tenía que quedarse en su casa reposando y el vicepresidente asumiera cuando ella se restableciera a ocupar su cargo de nuevo y luego ir al próximo proceso electoral cuando correspondiera, muy sencillo, yo me fui por esa lógica, yo no vi que había un acto de maldad, ni de golpe de estado, nada de eso, ella estaba enferma, le dio un ACV, yo le estaba ayudando a través de Fundacomunidad, pero había un vacío de poder, lo resuelve el vicepresidente Miguel Ángel Da Silva y haciendo uso de sus facultades asume con una directiva, en una reunión donde eran ocho miembros y estaban seis, hubo una abstención y los cinco decidieron apegarse al reglamento que sostenía la ausencia temporal del presidente y asume el vicepresidente.
– ¿Era una pugna entre chavistas y opositores?
– Ahí es donde se enreda la cosa, hay algunos que se asumen de la revolución, aunque su conducta puede ponerse en duda, pero era gente amiga. Nos dijeron golpistas, pero tuvimos el visto bueno de la presidencia de la Sociedad Bolivariana nacional, pero eso ya pasó.