James Rodríguez está en el túnel de salida del Real Madrid, a la espera de que le abran la puerta para coger las maletas y dejar atrás el Santiago Bernabéu. Su despedida de la afición merengue este pasado domingo es una evidencia más de que el colombiano está en la recta final de su periplo por la capital española. Es momento por tanto de evaluar su paso por el club blanco. Innegablemente irregular, contando sus tres temporadas.

Y es que, tal y como analizaba Goal ya este lunes, el ‘10’ pasó de una temporada muy buena a otra muy mala, dejando para el final una campaña digna sin más. El último regusto es, por tanto, algo agridulce por las expectativas creadas. Pero las estadísticas, sin embargo, hablan a su vez de un jugador más que útil para los intereses merengues: a una media de 36 partidos, 2400 minutos, 12 goles, y 13 asistencias por cada una de sus tres temporadas.

Todas las noticias del Real Madrid De hecho, por su proyección e imagen internacional, además de su juventud y estas estadísticas, el valor de mercado de James no se ha devaluado en exceso. No ha crecido -como por momentos se podía esperar-, pero tampoco ha caído por los suelos. Esto es, ni es un caso como el de Marcelo o Marco Asensio, pero tampoco como el de Kaká, en el extremo contrario.