No todos los estadounidenses crecen sabiendo disparar un arma, pero los que sí lo hacen, en general comienzan jóvenes.
Cuando tenía cinco años, Dan Baum comenzó a disparar armas de fuego.
Baum es el autor de «Gun Guys: A Road Trip» y recorrió el país aprendiendo sobre la cultura de las armas de Estados Unidos.
Cree que las academias de tiro pueden enseñarles a los niños valiosas lecciones sobre respeto y disciplina.
«Puede ser muy bueno para los niños», dice. «Lo que le dices es: ‘Este es un dispositivo extremadamente peligroso, que estoy poniendo en tus manos y confío en que lo utilices correctamente’».
Un 31% de los hogares estadounidenses tenían en 2012 al menos un hijo y una pistola en el hogar, según el Centro de Ley para la Prevención de la Violencia Armada.
Para muchos padres, ser propietario de un arma también significa enseñarles a los niños a respetarlas y dispararlas desde que son pequeños.