Noticias-kikiriki.- Un equipo científico internacional entre los que se incluyen investigadores chilenos acaba de descubrir algo revelador sobre este tema. Según el grupo, la existencia de los agujeros negros supermasivos se debería a un fenómeno entre galaxias. Más específicamente: el brutal choque entre dos de ellas.
El documento publicado en Nature lanzó la conclusión después de tomar 20 años de observaciones de telescopios como el Hubble o el Keck y el observatorio de rayos-X Neil Gehrels Swift.
El astrónomo del Instituto de Astrofísica de la Universidad Católica, Ezequiel Treister, explicó en qué consiste el estudio:
«Lo que descubrimos es que casi el 20% de los agujeros negros en rápido crecimiento (conocidos como AGN) están asociados a las últimas etapas del proceso de choque de galaxias. Es decir, un poco antes que se fusionen y formen un solo y colosal agujero negro», dijo.